Oldies, Goldies: 5 series viejitas para volver a ver en Netflix

Harto de escuchar a tus amigos hablar de Neflix y dado que ninguno de ellos te quiso pasar la contraseña, te suscribiste al servicio de streaming pago más popular. Inmediatamente te zambulliste en lo que parecía un reservorio inagotable de películas y series. Pero como nada es infinito, un día descubriste que ya habías visto desde House of cards hasta DareDevil, pasando por Better call Saul, Sense8 y Between… en shock de adrenalina, hasta Scream viste… ¿y ahora qué? ¿Despegar el culo del sillón y volver a hablar con tu familia? ¿Comprobar si tu relación de pareja todavía existe? ¿Responder los ochocientos mensajes de tus amigos? Mientras decidís si hacés alguna de esas cosas o mejor arrancás con Jessica Jones, desde estas humildes páginas te brindamos otra alternativa: repasar alguna de esas series clásicas que, por H o por B nunca miraste en orden o simplemente tenés ganas de volver a ver.

Como cada uno tiene sus favoritas y antes de que me empiecen a reclamar, con voz de Capusotto en la Pizzería Los Hijos de Puta: «¿Y mi Breaking Bad? ¿Dónde está mi Breaking Bad? » «¡Eh, yo la quería con Lost!» aclaro los criterios utilizados para la selección. Solo incluí series que hayan finalizado (lo que deja afuera a algunas de larga data pero aún en carrera como Doctor Who o Bones), preferentemente con al menos una década desde la emisión de su último capítulo (por lo que no incluí las mencionadas Lost y Breaking Bad ni Prison Break o Dexter, haciendo una ligera excepción por Death Note) y cuyos capítulos se encuentren disponibles en su totalidad (por eso no aparece, por ejemplo, The Nanny)

THE ONE WITH THE RERUN

Serie: Friends (Friends)
Años: 1994 – 2004
Temporadas: 10

Friends es una de esas series que casi todos vimos, pero que pocos han seguido ordenadamente. Después de todo se proyectó entre Septiembre de 1994 y Mayo de 2004, época en la que «me la bajo de internet» no era una alternativa muy común a la hora de ver series.

Por si acaso queda por ahí alguno que se haya pasado las últimas dos décadas en una isla y no sepa de qué trata esta comedia, es tan simple como seguir la vida diaria de Mónica (Courtney Cox), Chandler (Matthew Perry), Phoebe (Lisa Kudrow), Joy (Matt LeBlanc), Rachel (Jennifer Aniston) y Ross (David Schwimmer). Según palabras de sus productores «Trata sobre amor, relaciones, carreras, los momentos de tu vida donde todo es posible, y también de amistad. Porque cuando estás solo y en la ciudad, tus amigos son tu familia». La fórmula no es original, pero sí efectiva… tanto que el último episodio se proyectó en una pantalla gigante en las calles de New York, ciudad en la que transcurre la ficción. La cantidad impresionante de estrellas invitadas (algunas con papeles secundarios de extensa duración) es un plus interesante.

FICCIÓN ARGENTA

Serie: Los Simuladores (Los Simuladores)
Años: 2002 – 2003
Temporadas: 2

Allá por el 2002, cuando la pantalla local estaba dominada por las ficciones de dudosa calidad del Chueco Suar, Damián Szifron sorprendía con una propuesta distinta. Una serie acerca de un equipo que por una módica suma asistía en la resolución de conflictos (desde recuperar a una pareja hasta castigar a un político corrupto) mediante elaborados engaños denominados «operativos de simulación». Mario Santos (Federico D’Elía), Pablo Lampone (Alejandro Fiore), Emilio Ravenna (Diego Peretti) y Gabriel Medina (Martín Seefeld) conformaban esta especie de Brigada A local.

Con todas sus falencias, que las tiene y sobre todo en el reparto, para ser una producción autóctona destaca aún hoy en día. Tanto los clientes como las víctimas de los operativos solían estar a cargo de actores conocidos, haciendo buen uso del cameo, tan popular en la pantalla norteamericana. Como curiosidad: la serie funcionó tan bien que el formato se vendió a Chile, España, México y Rusia (dónde se llamó «Los reyes del juego»). Además, es breve: apenas veinticuatro episodios.

LOS VAMPIROS DE ANTES NO USABAN GOMINA

Serie: Buffy, la cazavampiros (Buffy the Vampire Slayer)
Años: 1997 – 2003
Temporadas: 7

Este drama sobrenatural creado por Joss Whedon y protagonizado por Sarah Michelle Gellar se centra en el personaje de Buffy Summers (Gellar), la última de las «cazadoras» o «cazavampiros». Las cazadoras son jóvenes que han sido «llamadas» para luchar contra vampiros, demonios y otras criaturas oscuras. Como todas sus predecesoras, Buffy es entrenada por un Vigilante, pero a diferencia de las demás ella cuenta con un grupo de leales amigos conocidos como los scoobies que la ayuda en el desempeño de sus sobrenaturales tareas.

La serie figura en muchas listas de «mejores», incluyendo la posición cuarenta y uno de la «Guía de los 50 programas de televisión más grandes de todos los tiempos», el segundo puesto en la selección de «Los 50 mas grandes programas de televisión de todos los tiempos» de la revista Empire y el tercer puesto en el «Top 25 de las series de culto más grandes de todos los tiempos», además de ser una de «Las 100 mejores series de todos los tiempos» de la revista Time.

Su éxito le mereció un spin-off, llamado Angel y centrado en el personaje homónimo encarnado por David Boreanaz, que se extendió por cuatro temporadas.

ANIMATE

Serie: Death Note (Desu Nôto)
Años: 2006 – 2007
Temporadas: 1

Los amantes del manga y el animé seguramente ya conozcan esta serie de animación. Light Yagami es un afortunado adolescente japonés: no solo su inteligencia supera largamente el promedio, sino que además es un gran deportista y un auténtico triunfador con las mujeres. Pero su vida se pondrá mucho más interesante cuando entre en posesión del Death Note, una libreta con la sobrenatural particularidad de que si se escribe en ella el nombre de una persona, esta morirá. Solo es preciso conocer el nombre y el rostro de alguien para eliminarlo sin dejar rastros (hay mas reglas, que se van revelando capítulo a capítulo).

Ligth conservará en secreto este poder y lo usará para limpiar el mundo de delincuentes… y de todo aquel que se oponga a él. La principal oposición llegará de parte de L, misterioso detective que ha asesorado durante años a la Interpol en la resolución de casos particularmente espinosos. L es, por lejos, lo más interesante de la serie. Se trata de otro muchacho de edad y capacidades intelectuales y físicas similares a Ligth, pero investido de una serie de manías características: suele andar descalzo, encorvado y con las manos en los bolsillos, se sienta en cuclillas porque eso favorece sus capacidades deductivas y come constantemente toda clase de dulces (sin engordar un gramo, el muy desgraciado).

Aunque por momentos la historia se vuelve algo pesada, Death Note es un clásico de la animación japonesa y una buena puerta de entrada al género para quienes, como yo, busquen iniciarse en el. Y si te enganchás, hay un par de películas y una serie live action para calmar el vicio.

PRINCIPE Y MENDIGO

Serie: El príncipe del rap (The Fresh Prince of Bel Air)
Años: 1990 – 1996
Temporadas: 6

Antes de Bad Boys (1995), Independence Day (1996), Men in black (1997) o Wild, Wild, West (1999); el rapero devenido actor Willard Carroll Smith, Jr. ya era Will Smith y con sus entonces 22 años se ponía en la piel de un adolescente humilde trasplantado a la alta sociedad (vieja costumbre la de asignar papeles de párvulos a actores mayores).

El príncipe del rap es una comedia liviana con pretensiones de denuncia. El personaje de Will contrasta con el de sus primos Carlton (Alfonso Ribeiro), un republicano conservador y pedante e Hilary (Karyn Parsons) una hueca y malcriada niña bien. La mayoría de los argumentos giran en torno a las diferencias de clase entre afroamericanos ricos y afroamericanos pobres y como estas se ven soslayadas por el hecho de que todos son igualmente discriminados por (ciertos) blancos.

Probablemente la mejor forma de encarar esta serie sea armando una maratón de fin de semana con un grupo de amigos, preferentemente bajo la influencia del alcohol o la sustancia alucinógena de su preferencia.